Creo que las obras son las que deberían hablar, no las promesas o las lapidaciones.
Yo solo me convenceré cuando vea el producto final.
Lo que me deja ciertas dudas de la capacidad intelectual de los peruanos o de sus gustos es que sigan a una serie tan terrible como SAINT SEIYA, y peor que le rindan homenaje, habiendo tantos animes mucho mejores.
En fin, ya veremos como queda el producto sudaca, que no es díficil superar la basura que nos han estado endilgando los japoneses.
Y aún no entiendo como alguien puede envidiar esta iniciativa, que envidien a Donald Trump, George Lucas o a Quentin Tarantino puede ser, pero envidiar a alguien que va a hacer una animación de SAINT SEIYA, ¡por favor! ¿Qué son ustedes, nerds patéticos sin vida?

Y bueno peruchos, sigan con lo suyo, pero no digan que no se les advirtió, que tengan suerte, la necesitarán.
Saludos.
